El Manchester City avanzó a la final de la Champions League tras vapulear al Real Madrid con una goleada de 4-0

El Manchester City se impuso por un contundente 4-0 al Real Madrid, asegurando su lugar en la final de la Champions League. Con el deseo ardiente de conquistar el trofeo, el equipo inglés dominó la vuelta de las semifinales en el Etihad Stadium, completando un marcador global de 5-1 y asegurando su clasificación. 

Impulsados por su condición de locales y la determinación de volver a la final, los Ciudadanos tomaron la iniciativa desde el principio. Con una postura avasalladora y un dominio absoluto sobre el equipo español, desdibujaron por completo la imagen del Real Madrid mediante una exquisita circulación del balón y movimientos inteligentes sin posesión. 

A los 13 minutos, generaron la primera ocasión de peligro con su destacado delantero Erling Haaland, quien conectó un cabezazo cerca del arco, pero se encontró con una destacada intervención de Thibaut Courtois, y posteriormente David Alaba despejó el balón en la línea. 

Manteniendo el control absoluto del juego, el equipo dirigido por Pep Guardiola volvió a advertir con claridad su superioridad. Una vez más, Haaland tuvo un cabezazo dirigido hacia la izquierda, pero esta vez el portero belga tuvo que realizar una espectacular atajada para desviar el balón al córner. 

Fruto de su insistencia y dominio, el conjunto Celeste logró romper el empate a los 23 minutos. Después de una excelente serie de toques, Kevin De Bruyne envió un pase preciso entre líneas para Bernardo Silva, quien dentro del área disparó con potencia al primer ángulo, venciendo a Courtois. 

A pesar de los esfuerzos del Real Madrid por salir del asfixiante dominio local y tener algo de posesión, encontraron una oportunidad para igualar el marcador con un potente disparo de Toni Kroos desde lejos que impactó en el travesaño. 

Sin disminuir en lo más mínimo su intensidad, los ingleses obtuvieron su recompensa con el segundo gol a los 37 minutos. Ilkay Gündogan aprovechó un rebote en el área y Bernardo Silva anotó con un sutil cabezazo, superando a Eduardo Camavinga tras un previo achique de Courtois. 

El descanso permitió al equipo de Carlo Ancelotti reagruparse y discutir en el vestuario la necesidad de cambiar su imagen de cara al segundo tiempo. Al comienzo de la segunda mitad, mostraron una mejor versión e incluso estuvieron cerca de descontar con un tiro libre preciso de Alaba, que fue atajado con seguridad por Ederson. 

Sin embargo, el Manchester City tenía un plan perfecto para contener a los españoles. Demostraron orden defensivo y seguridad en su actitud, poco a poco cerrando el partido y asegurando su lugar en la final. 

A pesar de su estrategia defensiva, no renunciaron al espíritu ofensivo y apostaron por los contragolpes. Haaland estuvo cerca de anotar en un mano a mano con el portero blanco, pero su remate fue desviado y terminó impactando en el travesaño. 

Finalmente, cerca del final del partido, el equipo de Guardiola sentenció el encuentro. Después de un lanzamiento de pelota parada, Manuel Akanji rozó el balón con la cabeza y Eder Militao terminó enviando el balón a su propia portería. 

En los últimos minutos, el City mantuvo el dominio y, para cerrar la victoria con broche de oro, el argentino Julián Álvarez capitalizó un pase filtrado de Phil Foden y definió con precisión hacia el lado izquierdo del arquero en tiempo de descuento. 

Con su boleto asegurado para la final de la Champions League, que disputarán por segunda vez en su historia, el Manchester City buscará conquistar su primer título en el torneo el 10 de junio en el Estadio Olímpico Atatürk de Estambul, enfrentándose al Inter de Milán. 

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