Tren Bioceánico: Una Ruta Estratégica para la Integración de Sudamérica

Pucallpa.- El proyecto del tren bioceánico, que conectaría Perú y Brasil desde Chancay, se perfila como una ruta clave para la integración de Sudamérica.

Esta ambiciosa iniciativa de infraestructura busca unir los océanos Atlántico y Pacífico, brindando beneficios significativos a ambos países.

La participación de China en este megaproyecto es notable, destacando el interés del gigante asiático en fortalecer los lazos económicos con América del Sur.

La inauguración del gran puerto en Chancay, prevista para noviembre de 2024, representa una oportunidad única para impulsar el crecimiento económico y comercial en Perú.

El proyecto del tren bioceánico, parte del Corredor Ferroviario Bioceánico de Integración, tiene como objetivo conectar varios países de la región, facilitando el tránsito de mercancías y potenciando el desarrollo regional.

Brasil ya posee una infraestructura ferroviaria establecida y solo necesita completar un tramo hasta la Hidrovía Paraguay-Paraná para lograr la interconexión.

Por su parte, Bolivia ha incorporado las construcciones necesarias en su Plan de Desarrollo Económico y Social 2021-2025.

El trazado del tren bioceánico comenzaría en el Puerto Santos en Brasil, ingresaría a Bolivia por Puerto Suárez, pasaría por los municipios de Montero y Bulo Bulo, y finalmente llegaría a Perú por el hito 4, concluyendo en el puerto de Ilo.

La construcción total comprenderá 3.755 kilómetros de vías a lo largo de su recorrido, haciendo realidad la interconexión entre Perú, Bolivia y Brasil.

A diferencia de Brasil y Bolivia, Perú aún debe iniciar las labores esenciales para incorporarse al proyecto del tren bioceánico.

Sin embargo, el país ha mostrado interés en avanzar en esta iniciativa, reconociendo su importancia para mejorar la conectividad y el flujo de mercancías.

China, a través de Cosco Shipping Ports, está impulsando activamente el megapuerto de Chancay y ha expresado su interés en concretar el tren bioceánico.

Por su parte, el titular del MTC, Raúl Pérez Reyes, reiteró que Perú no debería liderar la construcción del tren bioceánico, un megaproyecto que pretende conectar el océano Pacífico con el Atlántico.

"No creemos que debemos financiarlo. Si algún interés tiene Brasil o China en esto, ellos deberían encargarse de ello", manifestó el ministro, en relación con la reciente reactivación del proyecto debido al próximo inicio de operaciones del puerto de Chancay.

Pérez aseguró que el país está enfocado en salir por el océano Pacífico y no por el Atlántico.

Esta declaración del ministro resalta la postura de Perú en cuanto a las prioridades de infraestructura y desarrollo.

A pesar de esto, la colaboración internacional en este proyecto promete abrir nuevas oportunidades y fomentar el desarrollo regional, conectando mercados y mejorando la competitividad de los países involucrados.

En conclusión, el tren bioceánico representa una visión ambiciosa de integración y desarrollo en Sudamérica.

Con la participación de Brasil, Bolivia, China y Perú, este megaproyecto no solo busca mejorar la conectividad entre océanos, sino también fortalecer las relaciones económicas y comerciales en la región.

El avance en esta infraestructura estratégica es un paso hacia un futuro más conectado y próspero para Sudamérica.